Es muy conocido que hay “periodismo militante” (dudosamente periodismo real), tanto de partidos afines o contrarios al Gobierno, pero no todos son así.
Hay periodistas que simplemente van a trabajar, y así como no merecen el gas lacrimógeno de un policía, tampoco merecen la agresión o el insulto de ningún manifestante.
Mi nombre es Max Belaeff, soy periodista de varios medios de comunicación local –entre ellos La Ventana San Rafael– y a pesar de ser el único comunicador que estaba en la manifestación en defensa de los jubilados en ese momento, una manifestante que supuestamente “defiende la democracia”, me insultó injustamente mientras trabajaba. La “señora” –que prefirió no darme su nombre– dijo no ser jubilada pero estar ahí “para apoyar a los jubilados”, como otros de los presentes.
Me amenazó con denunciarme si publicaba su foto y/o video. Debería saber que no es ilegal filmar o tomar imágenes en la vía pública, ni siquiera al personal policial que a veces se opone a ser fotografiado, ya que son funcionarios públicos y si no tienen nada para ocultar, no hay motivo para que se nieguen. Independientemente del espíritu de una manifestación, lo que sí es ilegal es cortar una calle, y en todo caso, la que estaba cometiendo un delito era ella. Puede denunciarme cuando quiera, será una causa que –como tantas otras– quedará cajoneada en algún rincón de Tribunales.
