La semana pasada, Mons. Carlos M. Domínguez renunció a su cargo al frente del Obispado. Oficialmente, se dijo que lo hacía por “motivos personales”.
No obstante, el verdadero motivo –según autorizaron a informar desde el Vaticano– es que fue denunciado por “acciones indebidas” (expresión que se presta para múltiples conclusiones).
El obispo dejó repentinamente su cargo la semana pasada, y luego de ello partió rumbo a Italia. Había esgrimido “motivos personales”, pero sin detallar cuáles eran, lo cual ya causó muchas dudas en los fieles y en el resto de la población.
No obstante, por órdenes surgidas desde el Vaticano y asumiendo más la responsabilidad que implica, este jueves se informó que el ex obispo llevó a cabo “acciones indebidas”, específicamente contra adultos. Si bien el comunicado oficial no dice en ninguna parte la palabra “sexo” u otras vinculantes al mismo, es algo que tampoco descarta, lo cual podría causar aún más dudas.
Aquí el comunicado oficial:
Se informa a la comunidad diocesana que con fecha 3 de febrero del corriente año, personas adultas han denunciado ante las autoridades competentes a Mons. Carlos María Domínguez por acciones indebidas infligidas contra ellas, provocando la renuncia efectiva del mencionado obispo.
Asumimos el compromiso de custodiar la intimidad de los denunciantes y sus familias, quienes siempre tendrán el derecho de acudir a la justicia civil.
Dada la gravedad de los hechos declarados se ha iniciado una investigación para que se medien las acciones canónicas que corresponden conforme a los protocolos vigentes en la Iglesia.
Con el compromiso de transitar este proceso con transparencia y justicia, lamentamos la herida y el dolor que esto provoca en el pueblo de Dios, confiamos que la búsqueda de la verdad ayude a un camino de sanación.
Pbro. José Antonio Álvarez
Vocero de Prensa
Obispado de San Rafael