Un estudio reveló que el cambio climático, con su consecuente aumento del nivel del mar y la frecuencia de marejadas, y los desarrollos inmobiliarios, están eliminando uno de sus mayores atractivos.
Las costas chilenas enfrentan un proceso acelerado de erosión que amenaza con hacer desaparecer cerca de 80 playas a lo largo de ese país. Según estudios científicos recientes, este fenómeno tiene dos causas: el cambio climático, con un aumento de las marejadas, y los desarrollos inmobiliarios.Carolina Martínez, doctora en geografía y parte del Observatorio de la Costa, lidera un estudio que alerta sobre la rápida desaparición de playas emblemáticas. Entre sus hallazgos se destaca que las tasas de erosión en litorales angostos y urbanizados, como los de Chile, se han triplicado en las últimas décadas.
En playas como Santo Domingo, por ejemplo, el retroceso alcanza 5,7 metros por año, mientras que Los Molles ha perdido medio metro anualmente en la última década.
En lugares como La Boca de Concón, las marejadas han dejado las costas casi sin arena, transformando lo que antes eran amplias playas en estrechas franjas de tierra. La situación es similar en Algarrobo, donde el mar ya golpea las estructuras costeras, y en Coquimbo, donde las marejadas recientes han arrasado con sectores completos.
Causas y consecuencias
El cambio climático, con su consecuente aumento del nivel del mar y la frecuencia de marejadas, es el principal factor detrás de la crisis, de acuerdo con un informe del canal chileno “Mega Noticias”.
Sin embargo, la acción humana también tiene un rol clave. La construcción de proyectos inmobiliarios en áreas sensibles, como humedales y dunas, ha agravado la situación. “La falta de políticas públicas para la gestión integrada de áreas costeras está dejando nuestras playas desprotegidas”, explicó Martínez.
El cambio climático, con su consecuente aumento del nivel del mar y la frecuencia de marejadas, es el principal factor detrás de la crisis, de acuerdo con un informe del canal chileno “Mega Noticias”.
Sin embargo, la acción humana también tiene un rol clave. La construcción de proyectos inmobiliarios en áreas sensibles, como humedales y dunas, ha agravado la situación. “La falta de políticas públicas para la gestión integrada de áreas costeras está dejando nuestras playas desprotegidas”, explicó Martínez.
En Algarrobo, la instalación de costaneras y otras obras rígidas ha intensificado el efecto erosivo. En Los Molles, un humedal transformado en terreno para edificaciones ahora provoca inundaciones recurrentes, mostrando cómo la naturaleza recupera lo que le pertenece.
Las playas más afectadas
El estudio identifica un “top 10” de playas en mayor riesgo de desaparecer:
- Hornitos
- Pichicuy
- Bahía de Concón
- Reñaca
- Caleta Portales
- Algarrobo
- Bahía de Cartagena
- Santo Domingo
- Los Molles
- Pichilemu
¿Qué se está haciendo?
A pesar de las advertencias científicas, las acciones políticas han sido insuficientes. Los especialistas exigen medidas urgentes para mitigar el impacto del cambio climático y regular las intervenciones humanas en las costas.
Mientras tanto, comunidades locales, como en Los Molles, han iniciado acciones legales contra proyectos inmobiliarios que exacerban la erosión.