Geraldina Benítes, de 25 años, murió tras ser baleada en la cabeza en Godoy Cruz. Investigan a dos hermanos vinculados al narcotráfico.
Geraldina Benítes, una mujer de 25 años, perdió la vida tras ser alcanzada por un disparo en la cabeza en el barrio Jardín Victoria, en el oeste de Godoy Cruz. La joven, madre de una niña de poco más de dos años, murió en el Hospital Central luego de ser sometida a una cirugía por la gravedad de la herida, causada por un proyectil calibre 9 milímetros que no tuvo orificio de salida.
El incidente ocurrió alrededor de las 15:30 del jueves, mientras Benítes estaba cerca de su vivienda. Su pareja y su cuñado habían acudido a una casa vecina para dialogar con dos hombres sobre la reparación de una moto y un celular dañados. Durante la conversación, estalló un tiroteo que terminó con la joven gravemente herida al recibir un disparo en el costado izquierdo del cráneo.
Vecinos trasladaron de urgencia a Benítes al Hospital del Carmen, donde fue internada en terapia intensiva. Horas más tarde, se confirmó que presentaba muerte cerebral, y durante la madrugada del viernes se declaró oficialmente su fallecimiento.
En medio de las investigaciones, las autoridades lograron detener a un menor de 15 años, quien fue hallado escondido en el techo de una vivienda cercana que presentaba impactos de bala. El adolescente, oriundo del barrio Los Paraísos, habría estado acompañado por los presuntos agresores durante el enfrentamiento.
El fiscal Carlos Torres, a cargo del caso, ordenó pericias en la escena y tomó declaraciones a los primeros testigos. Durante los operativos, se incautó una pistola calibre 9 milímetros en el patio de una casa contigua, arma que podría estar vinculada al ataque y habría sido denunciada como robada.
La investigación apunta a dos hermanos como principales sospechosos. Ambos son señalados por los testigos y estarían relacionados con actividades delictivas y una banda narco que opera en la zona. Por el momento, sus identidades se mantienen en reserva, aunque las autoridades los vinculan con una de las organizaciones más violentas del oeste de Godoy Cruz.