La provincia de Mendoza deberá indemnizar con $22 millones a la familia de Sergio Bustos, un preso que falleció en 2019 en la cárcel de San Felipe debido a una infección en el colon.
Según una sentencia del Segundo Tribunal de Gestión Asociada, se concluyó que Bustos no recibió la atención médica adecuada tras quejarse de dolores abdominales, lo que agravó su estado de salud y resultó en su muerte.
Bustos, quien había sido arrestado preventivamente en mayo de 2019 por un caso de robo, comenzó a sufrir intensos dolores estomacales el 10 de agosto de ese año. Aunque inicialmente fue auxiliado por otros internos y trasladado al área de Sanidad, la atención médica se retrasó, lo que llevó al rápido deterioro de su condición. Pese a la intervención del Procurador de Personas Privadas de Libertad, Bustos falleció el 18 de agosto.
El fallo judicial señaló que la atención médica brindada fue insuficiente y que el Estado incumplió su responsabilidad de garantizar la seguridad y bienestar de los internos. Como resultado, se determinó que la pareja de Bustos recibirá $18,5 millones y su hijo menor $3,5 millones, con los intereses correspondientes acumulados.