En San Rafael, una rotisería ha emitido una advertencia a sus clientes tras ser víctima de una estafa en la que delincuentes se hacen pasar por el comercio para engañar a los consumidores. La situación fue denunciada tanto por los afectados como por los dueños del establecimiento.
Los propietarios de la Rotisería Brunella alertaron en sus redes sociales sobre un fraude en el que personas inescrupulosas utilizan el nombre y los menús del local para recoger "falsos pedidos". Estos pedidos son cobrados por adelantado, pero nunca se entregan, causando perjuicio tanto a los clientes como a la reputación del negocio.
En un comunicado publicado en sus redes sociales, los dueños de la rotisería explicaron: "Hay gente que usa nuestro menú viejo y nuestras fotos en Facebook. Habíamos advertido que podía ser una estafa y lamentablemente nos llegó un mensaje". Además, subrayaron que no tienen ninguna relación con los estafadores y pidieron a sus clientes que tengan cuidado: "Es lamentable porque quedamos mal parados nosotros, que lo único que hacemos es tratar de ganarnos nuestro dinero dignamente".
Los propietarios también señalaron que existen varios perfiles en redes sociales que están publicando su comida y menús falsos, e instaron a los consumidores a denunciar estos perfiles para "evitar estafas o que usen nuestro nombre". Subrayaron que les ha costado mucho esfuerzo construir su negocio y es injusto que alguien se aproveche de su trabajo.
Este tipo de estafa ya ha sido reportado por otros comercios en San Rafael, donde los delincuentes se hacen pasar por negocios legítimos y ofrecen productos a precios atractivos. Los clientes, atraídos por las ofertas, realizan pagos anticipados a través de transferencias bancarias o billeteras virtuales, pero nunca reciben los productos.