El Colibri fue letal y el Millonario cumplió con el doble objetivo en el Monumental.
River tiene un delantero letal que se llama Miguel Borja y por eso aseguró su lugar entre los 16 mejores de América. Derrotó a Libertad por 2-0 con un doblete del Colibrí y además de clasificar a los octavos, da pelea por el 1 en la tabla general y abrochó su pase el Mundial de Clubes que se disputará en 2025. Es el primer equipo argentino que logra este pasaporte, que en Sduamérica sólo tenía tres representantes de Brasil: Flamengo, Palmeiras y Fluminense.
El Millonario tuvo las situaciones más claras de la primera mitad, aunque recién pudo romper el cero a los 41, con una gran media vuelta de Miguel Borja. Antes, el conocido vértigo del equipo de Demichelis apareció de a ratos. Lo tuvo Nacho de entrada, también Colidio y hasta Paulo Díaz le dio al palo, con toda la gente lista para gritar el primero en el Monumental.
Aunque River fue dominador de la etapa, tuvo momentos de riesgo, especialmente cuando la visita dispuso de la pelota parada. El local cedió cuatro tiros de esquina en los 45’ iniciales y, se sabe, los guaraníes son potentes en la cancha de arriba. De todos modos, la más clara la tuvo Caballero, con un gran remate que se fue a centímetros del caño.
Libertad apretó, pero el Millo lo definió
El arranque del complemento fue complejo para el Millonario. Libertad salió decidido a buscar el empate y puso en aprietos al local, que se replegó y cometió algunos errores en la última línea. Esa situación generó espacios y River casi lo liquida de contra. Borja falló en un pase a Colidio y el Diablito Echeverri también tuvo su chance para ampliar diferencias y cerrar una noche tranquila.
Con el equipo guaraní sin piernas, todo quedó a pedir del local, que otra vez tardó en inflar las redes. Como en la primera mitad, hicieron cola para perderse goles (Colidio, Aliendro y los ingresados Barco y Solari), hasta que otra vez apareció el Colibrí. Recibió por izquierda, avanzó entre las marcas rivales, enganchó hacia adentro y definió. Golazo y una efectividad tremenda, que sirvió para dar un paso clave en la Libertadores y entrar al Mundial de Clubes.
River tiene un delantero letal que se llama Miguel Borja y por eso aseguró su lugar entre los 16 mejores de América. Derrotó a Libertad por 2-0 con un doblete del Colibrí y además de clasificar a los octavos, da pelea por el 1 en la tabla general y abrochó su pase el Mundial de Clubes que se disputará en 2025. Es el primer equipo argentino que logra este pasaporte, que en Sduamérica sólo tenía tres representantes de Brasil: Flamengo, Palmeiras y Fluminense.
El Millonario tuvo las situaciones más claras de la primera mitad, aunque recién pudo romper el cero a los 41, con una gran media vuelta de Miguel Borja. Antes, el conocido vértigo del equipo de Demichelis apareció de a ratos. Lo tuvo Nacho de entrada, también Colidio y hasta Paulo Díaz le dio al palo, con toda la gente lista para gritar el primero en el Monumental.
Aunque River fue dominador de la etapa, tuvo momentos de riesgo, especialmente cuando la visita dispuso de la pelota parada. El local cedió cuatro tiros de esquina en los 45’ iniciales y, se sabe, los guaraníes son potentes en la cancha de arriba. De todos modos, la más clara la tuvo Caballero, con un gran remate que se fue a centímetros del caño.
Libertad apretó, pero el Millo lo definió
El arranque del complemento fue complejo para el Millonario. Libertad salió decidido a buscar el empate y puso en aprietos al local, que se replegó y cometió algunos errores en la última línea. Esa situación generó espacios y River casi lo liquida de contra. Borja falló en un pase a Colidio y el Diablito Echeverri también tuvo su chance para ampliar diferencias y cerrar una noche tranquila.
Con el equipo guaraní sin piernas, todo quedó a pedir del local, que otra vez tardó en inflar las redes. Como en la primera mitad, hicieron cola para perderse goles (Colidio, Aliendro y los ingresados Barco y Solari), hasta que otra vez apareció el Colibrí. Recibió por izquierda, avanzó entre las marcas rivales, enganchó hacia adentro y definió. Golazo y una efectividad tremenda, que sirvió para dar un paso clave en la Libertadores y entrar al Mundial de Clubes.