El presunto agresor ya tenía una medida cautelar de restricción contra su expareja. Tras ser sometido a una endoscopía para extraer el objeto, quedó internado.
Una situación insólita ocurrió en las últimas horas cuando la policía fue a detener a un hombre de 30 años que había sido denunciado por violencia de género por su expareja. El sospechoso se tragó un encendedor y tuvieron que internarlo.El hecho ocurrió el domingo en pleno centro de la ciudad de Córdoba, en una casa ubicada en la calle Catamarca al 400. Según informaron los medios locales, el supuesto agresor está acusado de haber violado una restricción de acercamiento sobre la víctima para golpearla.
Acorralado por la presencia policial y para evitar ser detenido, el acusado apeló a una arriesgada maniobra: tomó un encendedor, se lo metió en la boca y lo tragó ante la mirada consternada de los efectivos que participaban del procedimiento.
El detenido manifestó entonces sentir un fuerte dolor en el pecho y lo trasladaron de urgencia Hospital San Roque, donde quedó internado tras ser sometido a una endoscopía para extraerle el encendedor.
Fuente: TN