En un hecho devastador ocurrido en General Levalle, Córdoba, un padre desobedeció la orden judicial que le prohibía acercarse a su expareja y, lamentablemente, llevó a cabo un acto de violencia extrema que resultó en la muerte de su propio hijo de dos años.
El terrible suceso tuvo lugar el pasado jueves por la tarde, cuando el agresor irrumpió en el hospital zonal con la noticia escalofriante de que había disparado a su hijo.
Todo se desencadenó tras una denuncia por violencia de género presentada por la madre del niño, su expareja, quien alegó ser víctima de agresiones psicológicas constantes. Como resultado de esta denuncia, se emitió una orden de restricción contra el agresor.
Desafiando esta medida judicial y bajo amenazas, el hombre se presentó en la residencia de la mujer y secuestró al pequeño. Trágicamente, minutos después, le quitó la vida con un disparo en la cabeza, en un intento de quitarse la vida que no tuvo éxito, ya que el arma falló.
Ante esta situación desesperante, llevó al niño al hospital zonal, donde los médicos confirmaron su fallecimiento. Posteriormente, el agresor fue detenido luego de confesar el crimen.
La investigación ahora está en manos de las autoridades policiales de la Departamental de Río Cuarto, Córdoba, en medio de la consternación y la conmoción provocadas por este acto atroz.