En Mendoza, hay unas 100 estaciones de servicio que -según referentes del sector- "están en riesgo de cerrar"; y el tope al aumento de los combustibles volvió a despertar la amenaza de cierres nocturnos de parte del sector. Así lo manifestó Isabelino Rodríguez, presidente de la Asociación Mendocina de Expendedores de Naftas y Afines (Amena) y de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA).
Rodríguez destacó que el centenar de negocios representa el 30% del total de estaciones de servicio que hay en Mendoza, situación que coincide con lo que ocurre a nivel nacional.
Se trata de las que venden menos de 300.000 litros de combustible por mes, que es la cantidad calculada por CECHA que debe vender una estación de servicio para ser rentable.
El dato surgió después de que CECHA envió un comunicado asegurando que al no haber podido elevar el precio de los combustibles acorde a la inflación, van a tener que tomar medidas extremas, como no abrir más de noche, iniciar el proceso preventivo de crisis y también -y lo más doloroso para los empleados- congelar las paritarias, que debían entrar en revisión.
Qué plantean los dueños de las estaciones de servicio
El comunicado de CECHA explica cuál es la problemática por la que están pasando los dueños de estaciones de servicio. Básicamente que, al tener que respetar el 5,66% mensual de incremento a los combustibles hasta octubre que permite el gobierno nacional -un porcentaje mucho menor al de la inflación- las ganancias no alcanzan para cubrir todos los aumentos a los que deben hacer frente.
El planteo es que se tomen medidas urgentes para que no sean los dueños de estas pymes quienes deban afrontar solos los costos de esta crisis.
También aseguraron que han intentado entablar un diálogo con el Gobierno nacional y no lo han conseguido. Con respecto a las petroleras, solicitaron que aumenten en porcentaje de ganancias con las que se quedan los estacioneros, que hoy es del 10%.
El comunicado de CECHA explica cuál es la problemática por la que están pasando los dueños de estaciones de servicio. Básicamente que, al tener que respetar el 5,66% mensual de incremento a los combustibles hasta octubre que permite el gobierno nacional -un porcentaje mucho menor al de la inflación- las ganancias no alcanzan para cubrir todos los aumentos a los que deben hacer frente.
El planteo es que se tomen medidas urgentes para que no sean los dueños de estas pymes quienes deban afrontar solos los costos de esta crisis.
También aseguraron que han intentado entablar un diálogo con el Gobierno nacional y no lo han conseguido. Con respecto a las petroleras, solicitaron que aumenten en porcentaje de ganancias con las que se quedan los estacioneros, que hoy es del 10%.
Qué medidas piensan tomar
Como ya lo dijeron en otras oportunidades anteriores, Rodríguez manifestó que lo que piensan hacer es no atender más en el turno noche, para achicar gastos.
También piensan abrir el procedimiento preventivo para establecimientos en crisis y congelar las paritarias que los empleados habían pedido volver a abrir para revisar el incremento salarial.
Por otra parte, Rodríguez aseguró que evalúan tomar estas y otras medidas si no se proponen nuevas soluciones por parte del Ejecutivo.
Hay que recordar que a nivel nacional son unas 3.000 las estaciones de servicio nucleadas en CECHA, que les dan trabajo a aproximadamente 65.000 personas.
Como ya lo dijeron en otras oportunidades anteriores, Rodríguez manifestó que lo que piensan hacer es no atender más en el turno noche, para achicar gastos.
También piensan abrir el procedimiento preventivo para establecimientos en crisis y congelar las paritarias que los empleados habían pedido volver a abrir para revisar el incremento salarial.
Por otra parte, Rodríguez aseguró que evalúan tomar estas y otras medidas si no se proponen nuevas soluciones por parte del Ejecutivo.
Hay que recordar que a nivel nacional son unas 3.000 las estaciones de servicio nucleadas en CECHA, que les dan trabajo a aproximadamente 65.000 personas.
Fuente: Diario Uno