En respuesta a los recientes anuncios del Ministerio de Economía de la Nación relacionados con el pago de una suma fija para empleados, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) emitió un comunicado de prensa destacando que el mecanismo de ajuste salarial del sector privado son las paritarias y no la imposición estatal en las relaciones laborales.
La CAME enfatizó que cada sector de la economía y cada empresa enfrentan situaciones únicas que no pueden ser homologadas para establecer aumentos generales de manera unilateral, incluso cuando el Ejecutivo nacional asume el 50% del incremento dispuesto.
En particular, la CAME resaltó que los sectores de Comercio y Trabajadores Rurales acaban de finalizar sus negociaciones paritarias, lo que hace que la concesión de un bono en este momento quede considerablemente desfasada con respecto a la posibilidad de futuras reaperturas de negociaciones. Esto ocurre en un contexto de inflación acelerada, donde las micro, pequeñas y medianas empresas han estado enfrentando pérdidas en sus resultados económicos durante varios meses.
La imposición del Estado en la actividad privada, según la CAME, no solo complica la relación natural entre empleadores y empleados, sino que también pone en peligro la ya frágil situación de miles de pymes que luchan contra un escenario de extrema fragilidad. Estas empresas se enfrentan a costos en constante aumento, la incapacidad de importar insumos básicos y una recesión que amenaza con afectar el consumo de manera creciente.
La CAME subraya la importancia de mantener y respetar el sistema de paritarias como el mecanismo adecuado para determinar los ajustes salariales en el sector privado, permitiendo así una negociación equitativa y ajustada a las necesidades de cada industria y empresa en el país.