El ansiado partido de los dioses del rugby en tierras mendocinas se saldó con una contundente victoria de los oceánicos sobre la selección local por 41 a 12. Más allá del resultado, Mendoza vivió una fiesta del rugby.
El estadio Malvinas Argentinas registró una entrada de 34550 espectadores ávidos de ver al mejor equipo de la historia de este deporte a nivel de selecciones en el marco de un torneo de gran categoría como el Rugby
Championship que reúne a los cuatro mejores equipos del Hemisferio Sur: Nueva Zelanda, Australia, Sudáfrica y Argentina.
Desde muy temprano los alrededores del estadio ubicado al pie del Cerro de la Gloria se fueron llenando de gente, vendedores de camisetas y puestos de comida.
Hinchas de San Rafael presentes en el Malvinas Argentinas |
Dentro del recinto hubo show de música en vivo, patios de comidas, sorteos y juegos en los distintos stands de los sponsors. Los equipos llegaron a las 14:45 horas, reconocieron la cancha y comenzaron los precalentamientos en el césped. Ovación para Los Pumas en su aparición pero también hubo aplauso cerrado para los hombres de negro.
Los Pumas que no estuvieron en cancha miraron el partido junto al palco de prensa |
Después de entonar los himnos llegó uno de los momentos más esperados: el haka. La danza maorí que ejecutan los All Blacks antes de cada partido para intimidar a sus rivales pero también para mostrarles respeto. Sesenta segundos donde se hizo total silencio en el estadio para disfrutar este ritual tan tradicional.
El partido comenzó bien para Los Pumas ya que a los 28 segundos de juego hubo un try argentino que finalmente no se convalidó. A partir de ahí todo fue color negro. Tres tries en pocos minutos fueron una montaña muy alta para escalar. Se logró contener el vendaval pero la suerte estaba echada.
En el entretiempo se rindió homenaje a los "Pumas de Siempre". Han sido 887 jugadores los que han vestido la gloriosa casaca Puma desde el primer test match en 1910. Un nutrido grupo de ex Pumas de distintas generaciones recibieron una camiseta del regalo y el aplauso del público.
El segundo tiempo vio una reacción de los argentinos que lograron marcar dos tries de la mano de Lucio Sordoni y de Agustín Creevy quien además de darse el gusto de anotar recibió una gran ovación del Malvinas cuando salió a precalentar. Resultado final de 41 a 12 y los visitantes levantaron el trofeo con las luces del atardecer en la precordillera. En conferencia de prensa los jugadores y su entrenador, Ian Foster agradecieron el trato recibido durante la semana por los mendocinos y se sorprendieron del furor que genera el rugby en esta zona de Cuyo.
Para La Ventana San rafael