El partido entre Los Pumas y los All Blacks, por el Rugby Championship, se empañó por una insólita agresión de Sam Cane, capitán del equipo neozelandés, a un menor que invadió el campo de juego tras el encuentro para saludar a sus ídolos.
Todo quedó grabado en un video que se viralizó a través de las redes sociales en donde se puede ver que a un adolescente corriendo en la cancha mientras era perseguido por personal de seguridad.
Cuando el intruso pasó cerca del grupo de jugadores visitantes, Cane le hizo una zancadilla, generando el repudio de gran parte del público que había copado el estadio mundialista de Mendoza. El menor cayó al piso pero se recompuso rápidamente y continuó con su carrera.
Luego, Cane se disculpó a través de su cuenta de Instagram. En su mensaje, admitió que cometió “un error” al detener al joven. “Reconozco que no era mi papel”, indicó el All Black, quien se mostró “decepcionado” por su acción.