A una semana de la muerte de Eric Mamaní, las fajas de clausura de la obra donde perdió la vida el niño de 7 años fueron violadas y un grupo de trabajadores ingresó al lugar para reactivar la construcción de los departamentos.
La situación se repitió en otros tres emprendimientos inmobiliarios ilegales de los hermanos Onofre Paco Vega y Florentino Daniel Paco, quienes cuentan con cerca de 500 unidades habitacionales en Guaymallén.
Ante esta situación, la Dirección de Obras Privadas de la comuna tuvo que volver a colocar las cintas para prohibir el ingreso de personas y las actividades en el lugar.
El menor falleció el 7 de marzo tras caer a un pozo de agua cuando se encontraba con su padre en un predio perteneciente a los empresarios bolivianos dueños de la constructora Idandi donde se estaban edificando unos dúplex en forma ilegal.
Miguel Valentini, director de Obras Privadas Guaymallén, indicó que “a pesar de todas las notificaciones siguen intentando reactivar las obras”.
En este sentido, el funcionario detalló que se está realizando un fuerte operativo con inspectores y se está trabajando en conjunto con la fiscalía para frenar estas acciones.
Además de la faja de Urquiza al 1000 donde ocurrió la tragedia, este miércoles también fueron violentadas las del inmueble ubicado en Franklin y Tito Francia. El lugar había sido clausurado el 8 de marzo.
Ese mismo día, la Justicia hizo lugar a un pedido para paralizar unas obras de Idandi y emplazó a los hermanos Paco para que frenen los trabajos en una construcción en un loteo de las calles Castro y Curupaytí.
Fuente: El Sol
