En un plazo de apenas 40 días, la Argentina debe reintegrarle al organismo la totalidad del giro.
La aprobación por parte del staff técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI) de la auditoría a diciembre de 2022 dispara un desembolso de US$ 5.300 millones, monto que prácticamente se transformará en una acreditación testimonial dado que en apenas 40 días la Argentina deberá reintegrarle la totalidad de ese dinero.
En el trazo grueso, la transformación del crédito stand by que el FMI le dio a Mauricio Macri en 2018 en el programa de Facilidades Extendidas (EFF) que se firmó en marzo de 2022 establece que se mantienen los vencimientos del préstamo original, al tiempo que se calzan nuevos desembolsos por magnitudes similares para su repago.
Durante el año pasado ese flujo dejó un saldo neto favorable a la Argentina de unos US$ 5.000 millones, que empieza a revertirse desde 2023.
De acuerdo al cronograma original Argentina le deberá pagar al FMI US$ 913 millones el 21 de marzo, US$ 1.763 millones el 22 de marzo, US$ 1.296 millones el 7 de abril, US$ 648 millones el 14 de abril y US$ 681 millones el 28 de abril, lo cual da un total de US$ 5.301 millones. A eso se debe sumar unos US$ 105 millones adicionales que vencen durante a abril correspondientes a obligaciones con otros organismos multilaterales.
En consecuencia, el giro de US$ 5.300 millones esperado apenas será registrado en las arcas del Banco Central por unos pocos días.
Incluso los tiempos juegan en contra. Sucede que la demora de unos 20 días en cerrar la recalibración de metas de reservas que, además, incluyó severas imposiciones por parte del FMI (no utilizar reservas para recompra de deuda y compensaciones de gasto por la reforma previsional) hace que el reporte del staff se tratado por el Directorio en dos semanas o, tal vez, se supere ese tiempo.
Por lo tanto, los pagos que la Argentina debe realizar la semana que viene por US$ 2.676 millones deberán ser afrontados con reservas internacionales que, precisamente, son las que no abundan en las arcas del Banco Central.
En el Ministerio de Economía confían en poder llegar a un acuerdo para eludir los vencimientos del 21 y 22 de marzo.
“Con la aprobación técnica se da por hecho que el Directorio aprobará la auditoría que dispara el desembolso, por eso vamos a ver si encontramos la manera legal de estirar esos vencimientos”, señalaron en el Palacio de Hacienda al ser consultados al respecto.
Es que, justamente, la delicada situación de las reservas internacionales es lo que el gobierno argentino y el FMI tratan de proteger para mantener la estabilidad macroeconómica.
Si bien será por sólo unos días, ceder US$ 2.676 millones profundizará la delicada situación por la que atraviesa el BCRA.