En muchas ocasiones, el ser humano siente que está viviendo cosas por las que ya pasó. Ese fenómeno se denomina déjà vu y la ciencia explica de que se trata.
Este término deriva del francés “ya visto” y fue implementado por el investigador Émile Boirac (1851-1917) en su libro L’Avenir des sciences psychiques, “El futuro de las ciencias psíquicas”. Más de un siglo después, las causas de este fenómeno siguen siendo debatidas por los científicos.
¿Qué son los déjà vu según la psicología?
Si bien distintas ramas de la ciencia se han ocupado de investigar este fenómeno, los psicólogos son unos de los más interesados en saber que son los déjà vu y por qué suceden. Margarita Fabello, licenciada en psicología (MN 11403) dio algunos puntos clave para entender como funciona el cerebro humano en este tipo de situaciones.
Según la psicóloga este fenómeno es definido como “la sensación de familiaridad que se experimenta frente a un evento actual y se vive difusamente como ‘recuerdo’”. Además agregó que: “es un fenómeno anómalo de la memoria. Se lo puede definir como un ‘fallo’ del proceso natural de la memoria y como tal se experimenta. Se clasifica así como ‘paramnesia’”.
No todas las personas experimentan de la misma manera este tipo de paramnesia del reconocimiento, es por eso que existen diferentes disparadores. “La sensación puede ser visual, sonora, espacial, etc. Pero en todas se vivencia como algo ‘ya visto’ o ‘vivido’”, comentó la licenciada.
Según la psicóloga este fenómeno es definido como “la sensación de familiaridad que se experimenta frente a un evento actual y se vive difusamente como ‘recuerdo’”. Además agregó que: “es un fenómeno anómalo de la memoria. Se lo puede definir como un ‘fallo’ del proceso natural de la memoria y como tal se experimenta. Se clasifica así como ‘paramnesia’”.
No todas las personas experimentan de la misma manera este tipo de paramnesia del reconocimiento, es por eso que existen diferentes disparadores. “La sensación puede ser visual, sonora, espacial, etc. Pero en todas se vivencia como algo ‘ya visto’ o ‘vivido’”, comentó la licenciada.
Por su parte, Romina Infantino, licenciada en psicología de la Universidad de Buenos Aires (MN 45488) dio información acerca de la duración de estos fenómenos y la confusión que generan en las personas que lo experimentan: “Suele durar unos minutos y se disipa dando lugar a cierta indecisión respecto de su interpretación: las personas se preguntan si lo ocurrido fue un sueño, un mensaje, una premonición”.
Al experimentar un déjà vu las personas intentar buscar algún tipo de explicación, sin embargo en la mayoría de las ocasiones no hay. “Surge de manera espontánea y claramente el componente emocional en la configuración de la experiencia es fundamental. Lo ‘ya visto’ o ‘ya vivido’ refiere invariablemente a la subjetividad integral de la persona”, explicó Fabello. Es importante destacar que este tipo de fenómenos “no necesariamente tiene que ver con traumas o padecimiento psíquico”.
¿Qué partes del cerebro actúan cuándo una persona sufre una déjà vu?
El cerebro es el que almacena los recuerdos y actúa como motor en este tipo de paramnesia del reconocimiento. “Hay tres estructuras cerebrales intervinientes para la formación de los recuerdos. El lóbulo temporal medial que incluye el hipocampo y la amígdala. Se sugiere que la amígdala estima la importancia emocional y en concordancia con el hipocampo logra la pregnancia en la memoria de estímulos fuertes y desestima los estímulos indiferentes”, argumentó Margarita Fabello.
Los déjà vu ocurren cuando las regiones frontales del cerebro están revisando los recuerdos en busca de algún tipo de error en la memoria, lo que provocaría un conflicto entre la sensación de recordar algo y saber no se vivió ese momento antes. “Se habla de una alteración en ese nivel (lóbulo temporal medial) que podría resultar en un desacople entre las memorias de corto y de largo plazo”, continuó diciendo la licenciada.
Los déjà vu ocurren cuando las regiones frontales del cerebro están revisando los recuerdos en busca de algún tipo de error en la memoria, lo que provocaría un conflicto entre la sensación de recordar algo y saber no se vivió ese momento antes. “Se habla de una alteración en ese nivel (lóbulo temporal medial) que podría resultar en un desacople entre las memorias de corto y de largo plazo”, continuó diciendo la licenciada.
Los científicos evidenciaron que esta sensación ocurre con mayor frecuencia en la juventud (entre los 15 y los 25 años) y se cree que se puede presentar ante estados de cansancio, falta de sueño, tensión emocional o estrés. “La estructura psíquica en formación de las personas jóvenes, por la etapa evolutiva misma que atraviesan, podría estar menos condicionada y, eventualmente, con mayor permeabilidad emocional y/o plasticidad neuronal a ser sujetos pasivos de este tipo de fenómeno”, explicó Fabello.
A raíz de los estudios realizados se cree que el fenómeno podría estar relacionado a ciertos neurotransmisores como la dopamina, los cuales son más altos en adolescentes y adultos jóvenes.
Los viajes pueden funcionar como disparadores de los déjà vu
Al viajar y conocer nuevos lugares, las personas pueden llegar a experimentar con mayor frecuencia este tipo de paramnesia. “Las personas que tienen esta experiencia manifiestan cierta familiaridad en la vivencia. Puede ocurrir al conocer un lugar por primera vez y experimentar sensación de ‘lo ya visto’ disminuyendo el efecto sorpresa debido al conocimiento de este a través de imágenes u otros estímulos visuales”, argumentó la licenciada Infantino.
Así mismo, explicó que esa familiarización del lugar puede ocurrir debido a factores ajenos a la memoria humana: “Por ejemplo, si camino por primera vez por el Central Park puedo experimentar sensación de familiaridad debido a conocer dicho lugar en fotos, documentales, películas”.
Lo recordado parece tan real que las personas creen haberlo vivido realmente. Sin embargo, los psicólogos y científicos que investigan el tema plantean que es un proceso confuso en el que se engaña a la memoria. “Es una configuración vivencial nueva que toma estímulos sensoriales actuales como activadores de esa situación pasada que se cree recordar vívidamente. En la exploración de ese ‘recuerdo’ lo que predomina es lo difuso y la imposibilidad de identificarlo como un evento real”, concluyó Margarita Fabello.