La proeza, que se presume que podría ser récord para la historia reciente del embalse, le llevó al hombre más de 20 minutos de lucha y debió contar con ayuda de su primo, con quien terminaron agarrándola con la mano para no lastimarla.
Federico, el afortunado pescador, aseguró que "era como si hubiera enganchado un tronco, no se movía. Apenas la enganché no tiraba mucho, pero cuando la quise traer se puso difícil. Me dejó sin tanza rapidísimo, así que me tuve que poner de espaldas al lago y caminar para ir acercándola”, contó el hombre.
La carpa gigante midió 1,10 metro y logró superar un ejemplar atrapado en septiembre de 2020.