Estados Unidos declaró este jueves una emergencia en salud pública por la viruela del mono al registrarse 6.600 casos en un solo día lo que le permitirá desembolsar fondos, recopilar datos y movilizar a más personal en la lucha contra la enfermedad.
"Estamos preparados para elevar la respuesta un nivel más para abordar este virus, e instamos a todos los estadounidenses a que se tomen en serio la viruela del mono y asuman la responsabilidad de ayudarnos a hacer frente a este virus", dijo el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra.
La declaración, efectiva por 90 días y pasible de ser renovada, tiene lugar cuando en el día de hoy se superaron en todo el país los 6.600 casos, aproximadamente la cuarta parte de ellos en el estado de Nueva York. Asimismo, los expertos creen que podría haber muchos más, porque a veces hay pocos síntomas, que pueden reducirse a simples lesiones.
Hasta ahora, Estados Unidos entregó unas 600.000 dosis de la vacuna comercializada como Jynneos en Norteamérica (Imvanex en Europa), y desarrollada inicialmente contra la viruela, pero es una cifra baja teniendo en cuenta que unas 1,6 millones de personas se consideran de alto riesgo en el país.
El Departamento de Salud estadounidense informó la semana pasada que alrededor del 99% de los casos en Estados Unidos se registraron en hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres, siendo la población prioritaria para la vacunación.
A diferencia de brotes anteriores en África, el virus ahora se transmite predominantemente a través de la actividad sexual, pero los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) advierten que también podría transmitirse durmiendo en la misma cama, compartiendo ropa y a través del contacto cara a cara prolongado.