El Centro Cultural de Uspallata se transformó por estas horas en un improvisado centro de campaña para recibir a los varados en la alta montaña debido al temporal de nieve que complicó el tránsito y el posterior rescate. "La gente venía shockeada", afirmó Fabián Tello, funcionario de Las Heras y parte del comité de crisis que tuvo que operar ante una circunstancia inusual.
En total, se estima que unas 450 personas habían quedado atrapadas entre el túnel internacional y Las Cuevas.
En el Centro Cultural de Uspallata ya había asistido a unas 200 de estas personas con algo caliente ante las bajas temperaturas y atención médica. Tello, que es secretario de la Intendencia de Las Heras, aseguró que no tuvieron complicaciones mayores en cuanto a la salud. "Algunos venían con problemas de presión y los estabilizamos", explicó. "Fue terrible para los más chicos", agregó.
"La gente venía shockeada, porque habían pasado toda la noche afuera, no se veía nada, más el viento y las temperaturas bajo cero", indicó el funcionario lasherino. Tello agradeció que no tuvieran que lamentar una víctima fatal.
Durante esas horas de incertidumbre, Gendarmería asistió a los vehículos particulares que quedaron inmovilizados entre bloques de hielo. En algunos casos, tuvieron que acceder a pie.
En tanto, desde Las Heras indicaron que aquellos vehículos particulares que habían quedado en la ruta quedaron bajo custodia de la Gendarmería hasta que las condiciones del tiempo mejoren.
Pero hacia adelante, se espera que un nuevo temporal vuelva el martes a la alta montaña y que haga intransitable la ruta internacional.