En octubre del 2019, el Gobierno mendocino decidió no renovar la licencia al empresario K Cristóbal López y la sala de juegos que funcionó unas dos décadas en San Rafael no pudo seguir operando, quedando un gran número de familias sin trabajo. Sin embargo, ahora, una empresa vinculada al mismo empresario operará las tragamonedas del Casino Central.
Sin embargo, la contradicción es un clásico de la política que al quedar expuesta demuestra la inoperancia. Es que ahora, sólo falta la autorización del fiscal de Estado para que se confirme la adjudicación a Traylon S.A. (otra empresa de López) de las tragamonedas del Casino Central de Godoy Cruz, que trabajarán durante los próximos diez años. Es luego de que el empresario kirchnerista ganara una millonaria licitación.
Cabe decir que Traylon prometió una inversión de 2.236 millones de pesos para la remodelación completa del edificio donde quedarán instaladas 720 máquinas. Para ganar la licitación, la empresa del empresario K superó a sus rivales en un complejo ítem como es el canon (cuánto se queda el Estado y cuánto se lleva el concesionario de las ganancias de las tragamonedas). Traylon, con un canon del 52%, elevó la oferta más tentadora para el IPJyC, frente a las demás propuestas: 62% de Desarrollos Maipú, el 71,87% de Plaza Central y el 54% de Fuente Mayor - New Star Casino Central.