Frente a los constantes reclamos de vecinos de todo el departamento, por la escasa o nula distribución de agua por parte de la empresa Aysam, camiones de la comuna salieron a las calles a repartir el preciado líquido. Más allá de la solución “momentánea”, las quejas continúan intensamente.
La escasez de agua es un problema que crece día a día en San Rafael, lo cual genera constantes quejas y fuertes críticas, como así también la organización de manifestaciones por parte de vecinos. Desde la comuna decidieron lanzar camiones hidrantes a recorrer calles de distintos barrios para dar una respuesta, llenando uno a uno los tanques de las casas. Si bien por un lado se aprecia una buena actitud municipal, se espera una solución pronta y definitiva por parte del organismo que tiene el agua a su cargo en la provincia.
Más allá de la buena medida –según dicen los empleados municipales que acompañan al camión–, “no están autorizados a subirse a los techos de las casas”, por lo cual deben ser los propios vecinos quienes, si quieren tener agua, deben subirse por sí solos y sostener la manguera hasta que se llena el tanque. La pregunta es ¿qué pasa en los casos en que no hay un vecino capaz de subirse?, ¿se quedan sin agua? Tal vez la buena medida tomada por la comuna, requiere de ciertos ajustes para que sirva del todo.
Contradicciones
Tal como pudimos comprobar desde La Ventana San Rafael, mientras el agua escasea en muchísimos hogares, generando un problema cada vez más serio, en otros puntos de la ciudad brota injustificadamente de acequias tapadas por basura, hojas y todo tipo desperdicios. Tal es el caso de avenida Moreno, donde este miércoles abundaba agua “limpiando” el asfalto.
